Desde los orígenes de la raza humana, los seres humanos han ido buscando maneras de facilitar sus procesos y su vida cotidiana. Esta búsqueda se mantiene en la actualidad. Para eso, han tenido que ir haciendo uso de los recursos que se encontraban a su alrededor, es decir, recursos naturales. Es así como han ido surgiendo diferentes disciplinas que se estudian y amplían en la actualidad. Una de ellas es la metalurgia.
La metalurgia ha sido importante en la historia de las civilizaciones como las conocemos hoy en día. Ha marcado un antes y un después en las posibilidades de desarrollo de nuestra especie. A continuación, veremos un breve seguimiento de la evolución de la metalurgia.
Edades de la historia
Para conocer el origen de la metalurgia, hay que posicionarse primero en la Edad de Cobre, que ronda en los 4000 a.C. En aquel entonces, el cobre se utilizaba especialmente para la construcción de piezas ornamentales. No se le daban otros usos puesto que se trataba de un material con baja dureza y resistencia.
Posteriormente, comenzó la experimentación con distintas aleaciones, como es el caso de la de arsénico o la de estaño. Esto dio lugar al Bronce. De tal importancia, que inauguró lo que hoy los libros de historia conocen como la Edad de Bronce. Este apareció hacia el 3000 a.C. siendo mucho más duro y cortante que el cobre.
El hierro fue el que inauguró la Edad de Hierro. Empezó a trabajarse hacia el tercer mileno a.C. Algunas de las técnicas que se empleaban en ese entonces para poder trabajar este metal fueron el moldeo a la cera, el templado de acero y la soldadura. Las primeras funciones tuvieron escenario en China.
Ya hacia la Edad Media, la metalurgia era un conocimiento ligado fundamentalmente a la técnica de purificación de metales, especialmente metales preciosos. También se vinculaba a la acuñación de monedas.
Los procesos de la metalurgia
En la actualidad, los procesos de lo que conocemos como metalurgia se basan en las siguientes fases:
La obtención del metal a partir del mineral
El afino o purificación, eliminando las impurezas
La generación de aleaciones
Tratamientos para mejorar la resistencia o las propiedades mecánicas del metal
Conozcamos la metalurgia extractiva
Cuando hablamos de metalurgia extractiva, estamos haciendo referencia al área de la metalurgia donde se estudia y se aplican operaciones y procesos para el tratamiento de minerales. También puede ser para el tratamiento de minerales que se considere que tienen especies útiles, es decir, metales, en su interior. Dependiendo el producto que se quiera obtener a partir de este tratamiento, se van a llevar a cabo diferentes metodologías.
En este sentido, podemos decir que la metalurgia extractiva tiene diferentes objetivos. Se destacan el alcanzar la mayor eficiencia posible en sus procesos, obtener altas tazas de recuperación, entre otros. Las etapas de esta área son el transporte, el almacenamiento, la conminución, la clasificación, la separación del metal de la ganga, la purificación y la refinación.
Hablemos de la metalurgia de polvos
Por su parte, la metalurgia es la técnica de producción de polvos de un metal. El principal objetivo de ello es emplear los metales en la elaboración de distintos objetos útiles. Se trata de un tipo de técnica de gran antigüedad, habiendo sido utilizada por primera vez en el año 3000 a.C. por parte de los egipcios. En ese entonces, se utilizó para fabricar hierro.
Los procesos fundamentales de la metalurgia de polvos son el compactado y el sinterizado. El primero es el que se encarga en particular de preparar las mezclas de los polvos. Esto lo hace o bien a temperatura ambiente o también a temperatura elevada. Se destaca por hacer uso de una presión alta. A partir de estos procedimientos, lo que se obtiene es un comprimido capaz de ser manipulado, pero frágil, por lo que su utilización debe hacerse con cuidado. El nombre que se le suele dar a este comprimido es aglomerado verde. Por su parte, el segundo proceso, conocido como sinterizado, consiste en la operación llevada a cabo para que el aglomerado verde sea expuesto a una fuente de calor inferior al punto de fusión de su metal. Lo que hace este proceso en particular es dar al metal una resistencia mecánica superior a la lograda anteriormente. El nivel de resistencia mecánica va a depender de las aplicaciones que se le piensen dar a los metales.
En la actualidad, la metalurgia es un área de investigación de gran importancia. Ha sido importante a lo largo de la historia del ser humano para mejorar sus condiciones de desarrollo y sus posibilidades de supervivencia. En este sentido, puede decirse que es la ciencia que ha permitido que la especie humana utilice parte de los recursos a su alrededor para su desarrollo.