Con el avance de los distintos equipos eléctricos, desde hace mucho tiempo, se ha empezado a debatir respecto de las ventajas y las desventajas del uso de los conductores de cobre y de aluminio para este tipo de proyectos. Esto se debe a que el cobre ha sido considerado como el conductor por excelencia a lo largo del tiempo y se suele conocer poco respecto al aluminio como alternativa.
Para poder entender la diferencia en el uso de estos dos materiales para los equipos eléctricos, es fundamental conocer las características de ambos. Cuando hablamos de características, en este caso, estamos haciendo referencia a aquellas características tanto eléctricas como mecánicas. Por eso, en esta ocasión, nos interesa contar acerca de algunos mitos que existen respecto al uso de aluminio en equipos eléctricos y responder a estos.
Tamaño
Un mito frecuente indica que los equipos eléctricos que se fabrican usando un bus de aluminio suelen ser más grandes que los que usan bus de cobre. Lo cierto es que las dimensiones externas de los equipos son las mismas independientemente del material del bus. Lo único que sí cambia es el tamaño de las barras internas.
Conducción
Otro mito sostiene que el aluminio no es capaz de conducir de la misma manera en que lo hace el cobre y que eso genera que tenga que trabajar a temperaturas más altas. Esto no es cierto, puesto que si los equipos eléctricos están diseñados utilizando como base el método de elevación de temperatura y si cumplen con los requisitos que todos estos equipos deben tener, los niveles de temperatura se van a mantener por debajo de lo indicado. Ello, independientemente de que se estén usando barras de aluminio en vez de cobre.
Resistencia
Otra preocupación que suele aparecer tiene que ver con las propiedades de resistencia a la tensión y a la expansión térmica. Muchos usuarios sostienen que esta no es la misma para los materiales de aluminio que para los de cobre. La resistencia a la tensión del aluminio es mucho menor que la del cobre. Al usarse para para una aplicación de corriente específica, la sección transversal de la barra de aluminio es un 56% mayor que la del cobre.
Resistencia a cortocircuitos
Un miedo frecuente respecto a la utilización de aluminio en lugar de cobre para este tipo de dispositivos tiene que ver con que las barras de aluminio no logren tener la misma capacidad para resistir cortocircuito si se compara con las barras de cobre. La realidad es que, al aumentar el tamaño de las barras de aluminio para alcanzar la misma conductividad que las de cobre, la resistencia a la tensión es algo que también va en aumento. Por eso, se logra que adquiera la misma capacidad de soportar los posibles cortocircuitos que puedan darse que las barras de cobre.
Deformación
Siguiendo con los mitos, uno frecuente dice que las uniones se tienden a deformar más cuando es aluminio, como consecuencia de la expansión térmica. Esto lleva, según la creencia, a que se provoque un calentamiento excesivo que pueda derivar en diversas fallas. Pero tampoco es cierto. Es real que el aluminio tiene una expansión térmica mayor que el cobre. No obstante, siempre es importante tener en cuenta qué aleación de aluminio es la que se está utilizando, debido a que si se usa una aleación de aluminio que tiene una alta resistencia a la tensión, se puede lograr un comportamiento térmico que sea similar al de una barra tradicional de cobre.
Alimentadores
Finalmente, otro mito frecuente sostiene que si se utiliza cableado de cobre para los alimentadores, todo el tablero debe estar hecho necesariamente en barras de cobre. Esto tampoco es real, puesto que las terminales de conexión en los interruptores de alimentación se clasifican como ALCU. Esto lo que hace es permitir la conexión de conductores de cobre o de aluminio indistintamente, sin que importe en realidad el material con el que están fabricadas las barras del tablero.